La bromelina, un encima encontrado en el extracto de piña, ha captado recientemente la atención de investigadores interesados en sus propiedades medicinales. La piña tiene una larga historia, una que data hasta tiempos prehispánicos, como planta medicinal en centro y sudamérica. En Europa, fue descubierta formalmente en 1891 y hoy en dia es investigada alrededor del mundo por sus aparentes efectos antiinflamatorios y antibacterianos.

La molécula detrás de los efectos

Entre los beneficios y usos de la bromelina (solo incluimos aquellos respaldados por estudios formales) están la reducción de inflamación, remover tejido muerto después de quemaduras, prevencion de acumulacion de fluidos en los pulmones y eliminar grasas. Adicionalmente, investigadores ahora buscan caracterizar sus efectos en la placa dental.

Combatiendo la inflamación

Un estudio de 2014 en el Journal of International Oral Health, halló que una dosis de 2mg/ml de bromelina in vitro logró inhibir a s. mutans y a p. gingivalis -bacterias periodontales nocivas- de manera significativa. Asimismo, sus autores concluyeron que había potencial para el uso de la bromelina como agente periodontal antibacteriano.

Apenas el año pasado, en Parnaiba, Brazil, científicos publicaron un artículo proponiendo varios mecanismos mediante los cuales la bromelina podría ser un tratamiento complementario útil contra la periodontitis. Estos investigadores notan un estudio que en 2008 demostró que la bromelina reduce moléculas en la superficie celular, lo cual por su parte reduce la sobreactivación de moléculas inmunes CD4+, y CD25 que acompaña a la periodontitis. Hay también evidencia de que los neutrófilos (también células del sistema inmune), cuando son activados en exceso, dañan al tejido periodontal. Se ha observado en otro estudio que la bromelina reduce la migración de neutrófilos a la región hasta por 85%. Hay más evidencia que respalda los efectos antiinflamatorios de la bromelina. Incluso está siendo probada como complemento alimenticio en terapias contra el cáncer.

 

Podría el consumo de piña entera brindarnos ventajas?

Es posible que el comer piña, en moderación, nos brinde beneficios mediante su contenido de bromelina. Un estudio en las Filipinas han observado beneficios inmunes para niños que consumieron el equivalente a una lata de piña todos los días por tres meses. Otro reporta que el jugo de piña ayuda a pacientes con enfermedades inflamatorias a combatir síntomas.

Si tus requerimientos dietéticos te lo permiten, ¡considera incorporar esta rica fruta a tu dieta para aprovechar sus beneficios! Pero recuerda que como con todas las comidas y bebidas ácidas y con alto contenido de azúcares, es importante beber agua y lavarse los dientes después de consumirlas.

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