¿Probar un helado o un sorbo de café resulta a veces una experiencia dolorosa para usted? Al cepillarse o limpiarse con seda dental, ¿hace a veces un gesto de dolor? Si es así, es posible que tenga dientes sensibles.
En los dientes sanos, una capa de esmalte protege la corona del diente, la parte sobre la línea de las encías. Bajo la línea de la encía, una capa llamada cemento protege la raíz del diente. Bajo el esmalte y el cemento está la dentina.
La dentina es menos densa que el esmalte y el cemento y contiene túbulos microscópicos (pequeños tubos o canales huecos). Cuando la dentina pierde su cobertura protectora de esmalte o cemento, estos túbulos permiten que el calor, el frío o alimentos ácidos o pegajosos alcancen los nervios y las células del interior del diente. La dentina también puede quedar expuesta cuando se retira la encía. El resultado puede ser hipersensibilidad.
Una higiene bucal adecuada es la clave para evitar el dolor de dientes sensibles. Consulte al dentista si tiene alguna pregunta sobre sus actividades diarias de higiene bucal o dudas sobre la sensibilidad dental.