Sabes que fumar es perjudicial para la salud, de modo que no debería sorprenderte que los cigarrillos y el tabaco para mascar también sean dañinos para la salud bucal. Por ejemplo, pueden causar mal aliento, pero eso es solo el comienzo.
Dejarlo es la única forma de reducir el riesgo de sufrir estos y otros problemas de salud relacionados con el tabaco. La capacidad adictiva de la nicotina, que se encuentra en cigarrillos, puros y tabaco de mascar, puede hacer que esto sea especialmente difícil. Por eso es importante disponer de un plan y una red de apoyo, personas que te ayuden a cumplir tu propósito. Escribe tus razones para dejarlo. El entrenamiento, los chicles y mantenerte ocupado pueden ayudarte a dejarlo. Habla con tu dentista o médico para ver si los medicamentos disponibles podrían ayudarte a dejar de utilizar el tabaco.